Crítica: Gato con Botas

Las otras vidas del Gato

Hacer una película con el Gato con Botas, podía ser tomar el camino fácil. El personaje ya estaba instalado en el inconsciente colectivo. Podía perfectamente ser una película de calidad estilo "directo a video", porque era hacer y cobrar.

Pero, afortunadamente, la gente de DreamWorks evitó ese camino fácil, y armó, alrededor de ese genial personaje, una película que funciona, que divierte, visualmente muy atractiva, y que no decepciona en lo absoluto.

Desde los primeros instantes podemos apreciar que se trata de una historia contada con un estilo visual distinto a las entregas de "Shrek". Inspirado en los westerns, con un uso estupendo del 3D, y con riqueza en los detalles, aún en escenas de planicies desérticas. Los personajes peludos son particularmente atractivos de ver, y casi se pueden tocar.

Banderas cumple, y lleva a su personaje aún más allá que en sus previas apariciones. La esencia se mantiene, mientras los detalles profundizan el papel. El Gato es adorable.

Salma Hayek tiene una especial química con su coprotagonista. Eso se nota. Las escenas con Gato y Kitty son tremendamente disfrutables y dinámicas, ayudadas por los animadores (la escena del baile, por ejemplo).

La historia tiene elementos de clásico western, adaptado, modernizado y divertido. Algunos chistes son muy buenos, y los que no se destacan, por lo menos funcionan. No hay referencias modernas, y el humor (como debe ser) está sustentado en los personajes y situaciones.

Por una vez, DreamWorks sale de su temática del héroe campbelliano. La historia no es del todo impredecible, pero, por lo menos, no es la misma de "autodescubrimiento" de otras entregas de la compañía.

Dinámica, entretenida, llena de humor para chicos y otro tanto para grandes, así como muchas referencias ideales para amantes de los gatos, "Gato con Botas" sorprende por ser más arriesgada que las últimas dos Shrek, muy divertida y disfrutable.

Una de esas películas que tiene todo para convertirse en una de esas que los chicos ven una y otra vez.

[***1/2 / *****]