Sí, lo sé, estoy en deuda

Muchas cosas pasan, y de repente, se me pasan los días sin decir una palabra. La última vez que escribí no había terminado el curso de lengaje de señas, no había tenido clases de la maestría, y el país no tenía aún presidente electo.

Es fácil notar en algunos blogs amigos, que toda la conmoción no me afectó sólo a mí, pero supongo que mal de muchos, consuelo de tontos, así que no me voy a excusar con eso.

Y acá estamos, en pleno diciembre, y yo planificando un viaje a fin de mes, tratando de tirar para arriba en los últimos meses del año, y buscando algo para ir a ver en el cine, que sea como la gente (no, "Luna nueva" no califica, ni ahí).

Como habrán podido observar, estimados lectores, este es un post que no sabe de qué se trata, es un post sobre el no post, una especie de metapost, llanito, llanito.

Tengo un par de cosas sobre las que quiero escribir, y lo haré ni bien pueda y encuentre la inspiración correspondiente.

Hasta entonces (que esperemos sea pronto).