Crítica: Die Welle (La Ola)
Nos tapó el agua
"La Ola" es un experimento social, al menos en la ficción, y debió ser una especie de experimento fílmico, en el sentido de ser una oportunidad interesante de analizar los comportamientos que llevan al totalitarismo.
El problema es que "La Ola" tiene un MENSAJE. Este MENSAJE está presente desde el primer momento, y todo lo que pasa en la película está orientado a decirlo. Así, con mayúsculas.
Entonces, nada de lo que pasa en la película está fuera de esa línea, y todo y todos son simples peones para que el director predique su evangelio.
Hay algo de cinismo y, por qué no, de totalitarismo en la forma de manejar a la historia y a sus personajes. Ya el comienzo, con el profesor escuchando música rock (como para contrastar, ¿vio?) marca algo tan planificado, tan cerebral, que no deja lugar a más dimensiones.
Todo y todos cumplen un papel para que el director dé su MENSAJE. Y poco importa si lo que pasa, pasa demasiado rápido, si no hay sentido de la progresión natural de las cosas. Porque lo importante es llegar al final trágico, a ese final no ganado* a fuerza narrativa, totalmente descontextualizado, y que juzga de forma totalmente injusta a quienes participan.
Porque al director no le importan sus personajes. No los quiere. Son funcionales a su MENSAJE.
Así de totalitaria es "La Ola".
[* / *****]
* "ganar" está utilizada en el sentido de "earn" en inglés.
Nota: la película la vi en el contexto del Festival de Cine de Montevideo 2009. En ese momento no escribí la crítica, y lo visto quedó dando vueltas en mi cabeza hasta ahora, que fue su estreno comercial.
Nota 2: me olvidaba. Hay algo que remite a la película (e imagino el libro, pero no lo leí) "El señor de las moscas". La diferencia está en que "La ola" tiene una autoconciencia que impide que sea creíble. La otra es una película imperdible.
"La Ola" es un experimento social, al menos en la ficción, y debió ser una especie de experimento fílmico, en el sentido de ser una oportunidad interesante de analizar los comportamientos que llevan al totalitarismo.
El problema es que "La Ola" tiene un MENSAJE. Este MENSAJE está presente desde el primer momento, y todo lo que pasa en la película está orientado a decirlo. Así, con mayúsculas.
Entonces, nada de lo que pasa en la película está fuera de esa línea, y todo y todos son simples peones para que el director predique su evangelio.
Hay algo de cinismo y, por qué no, de totalitarismo en la forma de manejar a la historia y a sus personajes. Ya el comienzo, con el profesor escuchando música rock (como para contrastar, ¿vio?) marca algo tan planificado, tan cerebral, que no deja lugar a más dimensiones.
Todo y todos cumplen un papel para que el director dé su MENSAJE. Y poco importa si lo que pasa, pasa demasiado rápido, si no hay sentido de la progresión natural de las cosas. Porque lo importante es llegar al final trágico, a ese final no ganado* a fuerza narrativa, totalmente descontextualizado, y que juzga de forma totalmente injusta a quienes participan.
Porque al director no le importan sus personajes. No los quiere. Son funcionales a su MENSAJE.
Así de totalitaria es "La Ola".
[* / *****]
* "ganar" está utilizada en el sentido de "earn" en inglés.
Nota: la película la vi en el contexto del Festival de Cine de Montevideo 2009. En ese momento no escribí la crítica, y lo visto quedó dando vueltas en mi cabeza hasta ahora, que fue su estreno comercial.
Nota 2: me olvidaba. Hay algo que remite a la película (e imagino el libro, pero no lo leí) "El señor de las moscas". La diferencia está en que "La ola" tiene una autoconciencia que impide que sea creíble. La otra es una película imperdible.
Comentarios
Después que la consigas, contá qué te pareció.
A lo mejor ibas y te encantaba...
Por el otro lado, "El cazarrecompenzas" no parece una buena alternativa. Y a Aniston no la tolero.
A vos te parecerá bueno que yo puntúe bajo. A mí no, porque quiere decir que tuve que fumarme un montón de películas pobres.
Abrazo.
http://www.imdb.com/title/tt0083316/
Tengo que ver esta nueva versión para comparar.
Un abrazo.