Face to Face(book)
El martes de noche estaba complicado, frustrado, sin saber muy bien qué hacer (women, of course).
Entonces me quedé vagando por la web (webeando) hasta altas horas de la madrugada.
Y así fue que me dije: "vamos a ver qué tal eso del Facebook".
En realidad llegué por dos motivos (además de porque tenía que hacer algo para distraerme). El primero fue que había escuchado un informe en "Las cosas en su sitio" en la mañana, y lo pintaba como algo interesante. El segundo fue la curiosidad (odio no saber de qué se tratan las cosas, estar por fuera).
Pasaron casi 48 horas, y todavía no tengo una idea clara de qué se trata, y si vale o no la pena.
Por un lado, hablé con Mari, que hacía unos meses no hacía, y me encontré con otra gente (que en realidad es gente que veo por messenger también). Y vi que estaban otros que hace años no sé de ellos, pero que saludarlos sería terriblemente incómodo (mi primer amor del liceo!).
Por el otro, vi nombres que me llevan a otras épocas, pero no de las que quisiera recordar particularmente, personas cuyo destino me resulta indiferente, algunas cuyo recuerdo me incomoda.
Se supone que es una herramienta interesante para encontrar gente, socializar, etc. Puede ser súper útil, sobre todo para el que quiera reencontrarse con su pasado, e imagino que debe ser particularmente conveniente para el que vivió en más de un país.
Pero aclaro que, contrariamente a lo que uno quisiera pensar, no me resultó visualmente atractivo para nada.
Blogger, messenger, twitter, facebook, gmail, skype... no sé si me da el día para estar en todo.
Ahora sí, el cuento de que la gente está más desconectada ahora que antes es claramente una mentira.
Entonces me quedé vagando por la web (webeando) hasta altas horas de la madrugada.
Y así fue que me dije: "vamos a ver qué tal eso del Facebook".
En realidad llegué por dos motivos (además de porque tenía que hacer algo para distraerme). El primero fue que había escuchado un informe en "Las cosas en su sitio" en la mañana, y lo pintaba como algo interesante. El segundo fue la curiosidad (odio no saber de qué se tratan las cosas, estar por fuera).
Pasaron casi 48 horas, y todavía no tengo una idea clara de qué se trata, y si vale o no la pena.
Por un lado, hablé con Mari, que hacía unos meses no hacía, y me encontré con otra gente (que en realidad es gente que veo por messenger también). Y vi que estaban otros que hace años no sé de ellos, pero que saludarlos sería terriblemente incómodo (mi primer amor del liceo!).
Por el otro, vi nombres que me llevan a otras épocas, pero no de las que quisiera recordar particularmente, personas cuyo destino me resulta indiferente, algunas cuyo recuerdo me incomoda.
Se supone que es una herramienta interesante para encontrar gente, socializar, etc. Puede ser súper útil, sobre todo para el que quiera reencontrarse con su pasado, e imagino que debe ser particularmente conveniente para el que vivió en más de un país.
Pero aclaro que, contrariamente a lo que uno quisiera pensar, no me resultó visualmente atractivo para nada.
Blogger, messenger, twitter, facebook, gmail, skype... no sé si me da el día para estar en todo.
Ahora sí, el cuento de que la gente está más desconectada ahora que antes es claramente una mentira.
Comentarios
Cuando hablás de "socializar", lo primero que se me vino a la mente es que te vas a transformar en un obeso habitante del "Axioma".
Saludos a Wall•E
Igual, como dije, no me pareció la gran cosa.
Todo el mundo dice que es adictivo y qué sé yo... no lo veo.
Le mando!
Martín, como en mi blog confesaste que te gusta Boney M (y hay que animarse, eh? en respuesta te dejé algunas confesiones, también...
Jijiji!
Blondie: sabés que no? O sea, lo tengo, agregué amigos, pero todavía no logró realmente interesarme demasiado...
mis favoritos!
Saludos cordiales,
Daniel Maldonado