Crítica: The Revenant
"The Revenant" es la mejor película que he visto de Alejandro González Iñárritu.
Tampoco es que eso sea mucho decir.
Visualmente impresionante (y por qué no, hermosa), "The Revenant" es una película acerca de la venganza. La venganza como motor de un hombre que estaba al borde de la muerte y la venganza como fin.
La primera consideración al respecto es que no se necesitan ni cerca de tres horas para contar esa historia y para llegar al mensaje que (un poco torpemente) trata de transmitirnos su director.
Por el lado del elenco, un buen (pero sobrevalorado) trabajo de DiCaprio, que tiene mucho de físico, pero no transmite demasiado. Se trata más de un trabajo de supervivencia que de actuación. Seguramente le den el Oscar, y cumpliendo con la tradición, será por una película en la que no lo merece. Tom Hardy, por otra parte, es perfecto en su papel, aunque el acento que usa suena demasiado extraño y descoloca un poco. Pero sin dudas el suyo es el personaje más armado, más completo y creíble.
Visualmente, González y Lubezki logran momentos geniales, de particular belleza y hasta poesía, pero caen en excesos (la cámara se moja con la nieve, se empaña, se llena de sangre... ¿es necesario?, ¿no distrae en vez de ayudar a la inmersión?).
En la historia hay excesos. repetición. al punto tal que cabe preguntarse cuál es el punto de muchas de las cosas que pasan y si de verdad todos los personajes secundarios necesitan una backstory tan detallada. Entre los franceses, los indios, lo que pasa con FitzGerald y su compañero, lo que pasa con el Capitán Andrew Henry (buen trabajo de Domhall Gleeson) y compañía, el guión parece querer abarcar demasiado y la historia se dilata.
Entonces tenemos todo lo que le pasa a Glass, y realmente le pasa de todo. Una y otra vez. sobrevive a cosas imposibles sin ningún propósito argumental discernible.
Claro, tiene a favor que cuando "The Revenant" está en movimiento, atrapa.
Alejandro González Iñárritu podría ser un director de grandes películas, si trabajara con guiones ajenos. Tiene buenas ideas con la cámara (no todas, pero muchas) y ambición, y consigue buenas actuaciones de sus elencos. También parece tener disciplina (a juzgar por todos los relatos de lo duro del rodaje) pero pierde siempre por goleada en los guiones. Ninguna idea puede ser simple, todo tiene que dar vueltas y más vueltas.
Menos maniquea que sus películas anteriores. "The Revenant" parece no odiar tanto a sus personajes. Démosle, entonces, a su director el beneficio de la duda (pero no el Oscar, por favor no el Oscar, no de nuevo).
Bien.
[*** / *****]
Comentarios
Eso sí, muchísimo menos pretenciosa que las sobrevaloradas Birdman y Babel, en mi opinión.